Reciben maestros de Guerrero clases de cómo sobrevivir a una balacera

La Secretaría de Seguridad Pública del estado enseñó a trabajadores, profesores y alumnos cómo tirarse al piso y cubrirse el rostro para protegerse; además les indicaron que no debían gritar hasta que pasara el peligro.

Estudiantes, maestros y trabajadores administrativos de la escuela primaria “José Martí” recibieron su primera capacitación para saber cómo reaccionar y ponerse a salvo en caso de que se vean involucrados en una balacera, en un curso rápido que estuvo a cargo de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del gobierno estatal.

En cuestión de segundos, un centenar de alumnos de la primaria de referencia se arrojaron al piso en sus salones, en el patio e incluso en el baño, ejecutando así las indicaciones del simulacro de una balacera.

Durante varios minutos, los niños y niñas permanecieron durante más de cinco minutos tirados en el piso, con las manos en la nuca y cubriendo el rostro con los antebrazos.

Tras un tiempo, maestros y personal de Seguridad Pública fueron pasando salón por salón, indicándole a los niños que debían permanecer quietos, sin gritar, hasta que se les dijera que había pasado el peligro.

Una vez que la zona se declaró segura, los adultos indicaron a los niños que se podían levantar, para posteriormente trasladarse al patio de la escuela si era necesario, o quedarse en sus salones-

Erika Marlen Arciniega Gómez, directora de Prevención del Delito de la Secretaría de Seguridad Pública estatal, informó que este tipo de prácticas se realizarán en todas las escuelas de nivel básico, tanto públicas como privadas, para que los alumnos estén en condiciones de saber actuar ante una situación de riesgo.

Refirió que se ha diseñado una estrategia de capacitación para los educandos, de forma tal que estén en condiciones de no ponerse en riesgo.

Por su parte, la directora del plantel, María Rafaela Álvarez, declaró que ese tipo de prácticas permiten que los niños no corran tanto riesgo en un ambiente tan violento como el que se vive en la actualidad.

Durante la evolución del ejercicio, uno de los niños preguntó al capacitador que ya sabía qué hacer en su escuela, pero cómo debía reaccionar cuando estuviera en la calle pues ya le había tocado quedarse en medio de una balacera.

El capacitador, informó que siempre que estuvieran ante una situación de peligro lo más recomendable era repetir el ejercicio hecho minutos antes: tirarse al piso, cubrirse la cara y esperar a que se les indique que el lugar es seguro.

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