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lunes, 29 de marzo de 2010

Succar Kuri no tendrá privilegios

El traslado del pederasta confeso Jean Succar Kuri, del penal de máxima seguridad de El Altiplano a la cárcel de Cancún, persigue facilitar el desarrollo del proceso judicial que enfrenta por los delitos de pornografía y explotación sexual infantil, hasta ahora estancados, declararon sus familiares ayer al visitarlo en la prisión.

Custodiado por el Ejército y cinco camionetas de la Policía Federal, el otrora magnate llegó más delgado y demacrado la madrugada de ayer al Aeropuerto Internacional de Cancún. De ahí fue conducido a la cárcel municipal a bordo de una unidad blindada conocida como Rinoceronte.

Después de su llegada, el nacido en Becharre, Líbano, quien se asume como “bonachón, mal hablado y trabajador” y con carisma suficiente para entablar buenas amistades, fue visitado por su esposa Gloria Pita y tres de sus cuatro hijos.

Jonathan Succar Pita pidió que si su padre es culpable, sea juzgado y condenado. “Que se lleve a cabo todo su proceso, si es culpable que lo condenen”, indicó. Su estancia en esta prisión permitirá que el proceso se desahogue con mayor velocidad, pues la distancia obstaculizaba la realización de las diligencias a las que tenían que acudir las víctimas del inculpado.

Succar Kuri se encuentra en el área de Albatros, en donde permanecerá durante 48 horas, según declaraciones del subdirector operativo Horacio Escobar, quien explicó que posteriormente será transferido al área de procesados.

El traslado del empresario —quien poseía diversos negocios en el Aeropuerto Internacional de Cancún y villas en la zona hotelera— de una cárcel de alta seguridad a una vulnerable, obedece a la instrucción emitida por el juez Segundo de Distrito, radicado en Cancún, Gabriel García Lanz.

Un perfil sicológico elaborado por la PGR en septiembre de 2006 describe a Succar Kuri como una persona con trastornos sexuales y de identidad; tendiente a la pedofilia, carente de normas y valores; proclive a establecer relaciones superficiales e inadecuadas, y que posee un coeficiente intelectual por encima de la media.

Es un sujeto de alta peligrosidad, “manipulador, egocéntrico, rígido, impulsivo e inmaduro emocionalmente”.

El documento recoge la narración de cómo conoció a su principal denunciante, una adolescente de 14 años a la que acepta haber seducido, con la que tuvo relaciones sexuales cuando él tenía más de 50 años y a quien dice le dolió perder. “Acepto que tuve relaciones con ella; pero hasta el segundo viaje que vine a Cancún; acepto que era menor de edad, pero ella ya no era virgen, ya había tenido relaciones sexuales (…)”.

Sin dar mayores detalles, Succar narra que de simple mozo ascendió hasta adueñarse de 12 tiendas en los aeropuertos de Acapulco, Monterrey, DF y Cancún, gracias a su destreza para los negocios y a sus amigos influyentes.

El gobernador Félix González Canto aseguró que Succar Kuri El Johnny no tendrá ningún privilegio dentro de la prisión. El secretario de Seguridad Pública de Quintana Roo, Miguel Ángel Ramos Real, informó que ante las carencias de la cárcel municipal de Cancún para albergar a un reo de alta peligrosidad se implementó una estrategia especial que impedirá que corrompa a custodios, escape o dirija desde el interior la venganza que juró en contra de sus denunciantes y las activistas que exigieron que fuera encarcelado.

La dependencia señaló que la cárcel de Cancún es segura e incluso alberga a 300 reos del fuero federal. “El interno de origen libanés recibirá el mismo trato que tienen todos los reclusos de Cancún”. En esa prisión hay mil 300 internos distribuidos de acuerdo al tipo de delito que cometieron.

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