Disfruta inauguración del Mundial con afición jarocha
Con los suyos, con los niños, los jóvenes, las mujeres, los ancianos, pero sobre todo con la camiseta bien puesta se presentó el candidato a gobernador Javier Duarte de Ochoa y su esposa Karime Macías de Duarte al auditorio Benito Juárez para el partido de fútbol de México contra Sudáfrica; y desde el puerto jarocho, terruño que concentra una de las mejores aficiones del país, salieron porras que marcan el camino hacia el triunfo.
Eran las 9 horas. Ahí estaban, en las pantallas, los jugadores que buscan la victoria y ahí estaban también ---pero en las butacas-- los integrantes del equipo que busca el triunfo para el progreso de los veracruzanos. Estaban toditititos, desde la embarazada que ya caminaba con esfuerzos, el niño de tres años que correteaba por la explanada, los chavos que se pintaron una banderita en la mejilla, la señora que giraba su cuerpo para bailar al ritmo de ¡Duarte! ¡Duarte! El ancianito que movía losaplaudidores, ese par de bolsitas largas y rojas que suenan fuerte, fuerte, cuando chocan.
En primera fila: los veracruzanos. A su lado y con ellos Javier Duarte de Ochoa y su esposa Karime Macías de Duarte. En medio de las camisetas verdes, del color de la Selección Mexicana, del color de la esperanza, del color que el PRI tiene en su logo, del color de los aliados (del PVEM y del PRV) y del color que distingue a los mexicanos; ahí en medio, entre los hombres y las mujeres que se pintaron de verde estaba el candidato a gobernador de la coalición Veracruz para adelante y de la mano de su esposa para aguantar todo un primer tiempo de muchas ilusiones y mucho coraje cuando Sudáfrica anotó un gol contra México.
Justo frente a la pantalla que marcaba el tiempo y mostraba las jugadas, Javier Duarte y Karime Macías de Duarte convivían con los veracruzanos que de repente gritaban chin…. cuando la pelota mexicana no pasaba por la portería sudafricana. Una y otra vez se escucharon expresiones que anunciaban un gol y no caía, pero ahí seguían todos con sus porras y con la ola para animarse hasta conseguir la victoria. Llegó el receso y entonces aumentó la convivencia.
Pasaba uno y pasaba otro…Ahí estaban los niños, hasta en fila, para que el candidato a gobernador Javier Duarte de Ochoa autografiara sus camisetas y sus balones, y ahí estaba también la otra fila de las señoras y de las chavitas para la foto con Duarte y Karime. A gusto, así estaban todos adentro del auditorio Benito Juárez y en espera del gol que mantiene vivo el orgullo mexicano.
Con emoción y pasión se vivieron los últimos minutos del partido de la Selección Mexicana y Sudráfrica con el equipo que encabeza el abanderado de la coalición Veracruz para adelante. Eso sí, cada quien desde su punto de juego porque se trata de un trabajo en equipo y entonces cayó el gol del empate y la Selección Mexicana mostró que tiene las tablas suficientes para dar la batalla en la cancha, pero el juego sigue y los pronósticos para los veracruzanos anticipan un 2 a 1 a favor de Javier Duarte de Ochoa porque la apuesta, sostiene el candidato a gobernador, se llama Veracruz y el objetivo es el progreso.
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